2.10—Composición química de cultivos es altamente variable


Los cultivos para consumo humano y animal demuestran un amplio rango de composiciones químicas.

Vease alegatos falsos de la Ruleta Genética al final de la página.

Análisis de la comunidad experta científica

El tema de la composición química, no se presenta correctamente en La Ruleta Genética y engaña al lector. Smith no reconoce que la composición de un cultivo varía según la variedad, temporada de crecimiento, ubicación geográfica y hasta la ubicación en las siembras del agricultor. Los cultivos GM que son aprobados y cultivados alrededor del mundo han demostrado tener composiciones que no son significativamente distintas de otras variedades del mismo cultivo.  Todas las variedades demuestran pequeñas diferencias entre sí.  No se han observado daños relacionados a los pequeños cambios en la composición que generalmente se encuentra. Además, dado que los cultivos GM deben ser analizados rigurosamente, se podría decir que tendrían una composición casi idéntica a otras variedades que son las nuevas variedades convencionales que no están reguladas ni han sido analizadas. Smith remarca su ignorancia del tema al citar un largo ensayo desacreditado en donde explica que las semillas de soya GM tienen un 14% menos de isoflavonas que las demas semillas de soya. Smith parece desconocer que el contenido de isoflavona en las semillas de soya varía en un 200-300%. Pero se ha demostrado que las semillas de soya GM tienen el mismo contenido de isoflavona que su cepa parental.

1. Las plantas no tienen una composición única y fija sino una composición que varía enormemente dependiendo de la variedad, lugar de siembro y año en que fue cultivado.

Las plantas que usamos como alimento para consumo humano y animal, contienen una amplia variedad de químicos producidos por la misma planta, tales como las antocianinas, glucosinolatos, isoflavonas, terpenoides y compuestos fenólicos (Ames et al. 1990; Baxter and Borevitz 2006; Hartmann 2007; Morant et al. 2008). Hay una variedad considerable de químicos y las cantidades de los mismos presentes en los alimentos y variedades convencionales de alimentos (Catchpole et al. 2005; Ioset et al. 2007; Sautter and Urbaniak 2007; Wang and Murphy 1994), un dato que La Ruleta Genética no menciona.

2. Los cultivos comerciales GM tienen la misma composición que otras variedades del mismo cultivo.

Se han realizado varios estudios sobre los cultivos GM que demuestran que contienen solo pequeñas variaciones con respecto a la composición química (Catchpole et al. 2000; Cellini et al. 2004; Ioset et al. 2007; Lemaux P 2008. Sección 3.6. ¿Sufren los alimentos diseñados genéticamente cambios en la composición nutritiva?; Padgette et al. 1996; Shepherd et al. 2006; Shewry et al. 2006;Taylor et al. 1999). Las diferencias observadas están dentro del rango natural de contenido químico observado en variedades de cultivos convencionales de alimentos para consumo humano o animal. Es decir, la composición de variedades convencionales de los cultivos se diferencian entre sí más de lo que un cultivo GM se diferencia de su planta de origen convencional – de hecho, la tecnología GM produce menos cambios.

3. Es de particular importancia entender que los cultivos de alimentos son materiales biológicos y que por ende, muestran una variabilidad biológica.

La composición química es importante para entender las pruebas de inocuidad (Cellini et al. 2004; EFSA GMO Panel Working Group on Animal Feeding Trials 2008). Para cualquier estudio del consumo de soya con animales, el contenido de los químicos de tipo isoflavona que están presentes en la semilla de soya debe ser determinado con precisión. Dicha información es necesaria para asegurar que cualquier cambio en el crecimiento del animal no se debe al contenido de isoflavona entre las distintas harinas de soya que se comparan para observar su efecto en los animales (Brown y Setchell 2001; Thigpen et al. 2004).

4. Cualquier discusión sobre algún cambio en la composición debe tomar en cuenta  que los cultivos muestran un rango de contenido para cada componente – Ningún cultivo GM ha sido aprobado que contenga una diferencia biológicamente significativa en sus componentes.

La discusión de La Ruleta Genética sobre los cambios en la composición química causados por la ingeniería genética, sin tomar en cuenta que dichos cambios son comunes en los alimentos convencionales y la influencia que tienen sobre la nutrición, no es un análisis útil ni instructivo acerca de inocuidad alimentaria.

5. La discusión de Smith sobre la cantidad “reducida” de isoflavona en la soya GM es un ejemplo perfecto de un análisis manipulado y erróneo.

Smith cita un estudio en donde se alega que las semillas de soya Roundup Ready tienen un contenido de isovlavona entre el 12-14% menor que la soya convencional. El problema con el estudio es que está mal diseñado y no toma en cuenta otros estudios que muestran que los resultados prácticamente no tienen ningún significado (Padgette SR et al. 1996; Taylor NB et al. 1999; Petterson y Kiessling 1984; Wang y Murphy 1994). Por ejemplo, el estudio usa una semilla de soya GM y un grupo de control con semillas de soya de distintas variedades – sin que ellos cultivaran sus propias semillas de soya. Según las publicaciones anteriores, las variedades de semilla de soya varían hasta un 200-300% con respecto a su contenido de isoflavona. La misma variedad cultivada en distintos lugares  puede variar hasta en un 200-300% con respecto al contenido de isoflavona (Petterson y Kiessling1984, Wang y Murphy 1994). La cifra de 14% que presenta Smith no es significante. Smith, además, ignora dos publicaciones avaladas por expertos científicos en donde se reporta que las semillas de Soya Roundup Ready tienen el mismo contenido de isovlavona que otras semillas de soya (Padgette et al. 1996, Taylor et al. 1999).

La Ruleta Genética demuestra que no tiene la intención de informarle al lector lo que en realidad dice la literatura científica (Lemaux 2008, Sección 3.6.). Los activistas anti-GM citan el ensayo de Smith como una indicación de que la soya GM posee un número reducido de isoflavonas

Referencias

Ames BN et al. (1990). Dietary pesticides 99.99% all natural. Proceedings of the National

Academy of Sciences U.S.A. 87: 7777–7781. La mayoría de las plaguicidas en nuestras dietas las producen las mismas plantas.

Baxter I R and Borevitz J O (2006). Mapping a plant’s chemical vocabulary Nature Genetics

38(7):737-738. Wild varieties of mustard  illustrate the huge diversity and variability of chemicals in plants.

Brown NM and Setchell KDR (2001). Animal models impacted by phytoestrogens in commercial chow: implications for pathways influenced by hormones. Laboratory Investigation 81:735–747. “Todos los investigadores deben estar vigilantes a la composición fitoestrogénica de dietas comericales de roederos porque hay una historia de efectos biológicos potentes en animales más grandes y humanos por altas concentraciones circulatorias de isolflavona.” isoflavona concentrations.

Catchpole GS et al. (2005). Hierarchical metabolomics demonstrates substantial compositional similarity between genetically modified and conventional potato crops. PNAS 102 (40) 14458-14462

Cellini F et al. (2004). Unintended effects and their detection in genetically modified crops. Food and Chemical Toxicology 42:1089-1125. Los efectos no intencionados de los resultados que son totalmente inesperados e impredecibles. Este ensayo se enfoca en la tecnología utilizada para detector resultados inesperados, lo cual incluye metabolómica, proteómica y transcriptómica. Estos términoas corresponden a varios tipos de huellas químicas.

EFSA GMO Panel Working Group on Animal Feeding Trials (2008). Safety and nutritional assessment of GM plants and derived food and feed: the role of animal feeding trials. Food Chemistry and Toxicology 46 Suppl 1:S2-70. Epub 2008 Feb 13. Resumen comprensivo y autoritario sobre el estado de los ensayos de alimentación en animal que se realizan con cultivos genéticamente modificados, incluyendo una discusión sobre sus fortalezas y debilidades. Los expertos asociados con la Autoridad europea de inocuidad alimentaria (European Food Safety Authority) brindan una amplia lista de varias ensayos de alimentación en animales y un anális técnico profundo sobre cómo interpretarlos.

Hartmann T (2007). From waste products to ecochemicals: Fifty years research of plant secondary metabolism Phytochemistry 68 (2007) 2831–2846 Ioset JR et al. (2007). Flavonoid profiling among wild type and related GM wheat varieties. Plant Molecular Biology 65 (5), 645-654

Lemaux P (2008). Section 3.6. Do genetically engineered foods have changes in nutritional content? Bajo revisión: Genetically engineered plants and foods: a scientist’s analysis of the issues (Part I).

Annual Review Plant Biology 59:771–812. Presenta la necesidad de evaluar un rango normal de variación en la composición de la planta cuando se decido que la ingeniería genética causa algún cambio. Proporciona referencias claves a estudios sobre la composición comparativa.

Morant A V et al. (2008). Beta-glucosidases as detonators of plant chemical defense. Phytochemistry 69:1795-1813

Padgette SR et al. (1996). The composition of glyphosate-tolerant soybean seeds is equivalent to that of conventional soybeans. J. Nutr. 126:702–16

Petterson H and Kiessling KH (1984). Liquid chromatographic determination of the plant estrogens coumesterol and isoflavonas in animal feed. Journal of the Association of Official Analytical Chemists 67:503-506

Sautter C & Urbaniak B (2007). Flavanoids for environmental equivalence profiling of GE plants ISB News Report. December 2007.

www.isb.vt.edu/news/2007/artspdf/dec0703. Archivo pdf consultado el 21 diciembre, 2008.

Shepherd LVT et al. (2006). Assessing potential for unintended effects in genetically modified potatoes perturbed in metabolic and developmental processes. Targeted analysis of key nutrients and antinutrients. Transgenic Res. 15:409–25. Demuestra que los nutrientes claves y los antinutrientes en papas genéticamente modificadas son sustancialmente equivalentes.

Shewry PR and other (2006). Are GM and Conventionally Bred Cereals Really Different? Trends Food

Sci. Technol. 18:201–9 Taylor NB et al. (1999). Compositional analysis of glyphosate-tolerant soybeans treated with glyphosate Journal of Agricultural and Food Chemistry 47 (10):4469-4473. DOI: 10.1021/jf990056g.

Otros estudios han demostrado que la composición de semillas de soya GM y no GM es equivalente. Este estudio demuestra que las semillas de soya tratadas con glicofosato tienen una equivalencia en su composición como la de las semillas de soya no tratadas.

Thigpen JE et al. (2004). Selecting the appropriate rodent diet for endocrine disruptor research and testing studies. ILAR Journal. 45:401-416.Las dietas de los roedores tienen una diferencia significativa en la actividad de estrógenos, principalmente debido a las grandes variaciones en el contenido de fitoestrógenos. Estos estrógenos pueden profundamente influenciar la fisiología del roedor.

Wang H-J and Murphy PA (1994). Isoflavona composition of American and Japanese soybeans in Iowa: Effects of variety, Crop year, and location J. Agric. Food Chem. 42:1674-1677. El contenido total de isoflavona varía dentro de un rango de 400%.

La Ruleta Genética falsamente alega:

Los cambios en las proteínas podrían alterar miles de químicos naturales en las plantas, incluyendo aumentar las toxinas o reducir los fitonutrientes.

1. Las plantas producen miles de químicos, los cuales, si son ingeridos, podrían combatir enfermedad, influenciar el comportamiento y serían tóxicas.

2. Los cambios genómicos descritos en esta sección [de La Ruleta Genética] podrían alterar la composición y concentración de estos químicos.

3. Las semillas de soya GM, por ejemplo, producen menos isoflavonas anti-cancerígenas.

4. La mayoría de los cambios inducidos por GM en estos productos pasan desapercibidos.

Smith observa que las plantas tienen miles de químicos naturales y especula que un cambio en el nivel de estos químicos podría ser dañino.